Dificultades en la lectura: dislexia

¿Qué es, en qué consiste?

El trastorno del desarrollo del aprendizaje con dificultades en la lectura se caracteriza por dificultades significativas y persistentes en el aprendizaje de habilidades académicas relacionadas con la lectura, como precisión en la lectura de la palabra, fluidez en la lectura y comprensión de la lectura. En estos casos, el desempeño de la lectura está muy por debajo de lo que cabría esperar para la edad cronológica y el nivel de funcionamiento intelectual, y da lugar a un deterioro significativo en el funcionamiento académico del alumnado.

Este trastorno no se debe a un déficit del desarrollo intelectual, discapacidad sensorial (visión o audición), trastorno neurológico, falta de disponibilidad de educación, falta de dominio del idioma de instrucción académica o adversidad psicosocial.

International Dyslexia Association, 2002, define la dislexia como dificultad específica de aprendizaje, de origen neurobiológico, que se caracteriza por dificultades en el reconocimiento preciso y fluido de las palabras y por problemas de ortografía y descodificación. Estas dificultades resultan de un déficit en el componente fonológico.

¿Cuáles son las señales o indicadores que podemos observar?

• Tiene dificultades en el procesamiento fonológico: confunde palabras similares, no segmenta palabras en sílabas, le cuesta reconocer si un fonema está en una palabra.
• Tiene dificultades para recordar el alfabeto.
• Le cuesta asociar fonemas (sonidos) y grafemas.
• Tiene dificultades para entender la información leída.
• Comete habitualmente errores al leer: omisiones, adiciones, sustituciones, rotaciones, se para en donde no debe (en medio de una palabra).
• La lectura es lenta y le cuesta mucho.
• Está muy nervioso/a o incómodo/a al leer en voz alta.
• Evita situaciones en las que tiene que leer.
• Realiza saltos entre líneas sin darse cuenta y se pierde con frecuencia.

¿Qué podemos hacer en el aula para ayudar a estos niños y niñas?

Trabajar habilidades de decodificación (para mejorar  en la lectura de palabras):

• Identificación de letras (características semejantes y diferentes de pares de letras, buscar una letra determinada sobre una hoja llena de letras...)
• Desarrollo de la vía subléxica o fonológica en edades tempranas:
• Segmentación de las palabras en sus letras componentes (utilizando letras de plástico o de madera, unir letras para componer palabras, romper palabras en letras).
• Segmentación de las palabras habladas en sus fonemas componentes (segmentación fonológica. Conocimiento  fonológico).
• Conversión de letras en sonidos. Reglas de conversión grafema-fonema. Conocimiento alfabético o conocimiento del nombre de las letras de forma aislada.  Trabajar la relación entre el grafema y el fonema. Utilizar gestos de recuerdo (Marc Monfort)
• Ensamblaje de los sonidos. (Unir los sonidos en la palabra global. Presentar grupos de letras para que se lean cada vez con mayor rapidez (sílabas, palabras y seudopalabras). Primero el alumno las tiene que leer una vez despacio y sin errores.
• Trabajar la precisión léxica mediante la comparación de palabras similares, la búsqueda de letras dentro de las palabras, o la selección rápida de una palabra dentro de un grupo de palabras.
• Morfología. Trabajo específico de las declinaciones en euskera.
• Entrenamiento en la lectura de palabras de diferente longitud (multisilábicas). listados de palabras.  para consolidar las representaciones ortográficas de las palabras , mejorar la ruta léxica y consecuentemente ganar en velocidad lectora. Cuidar que el niño o niña lea correctamente las palabras
• Presentar simultáneamente dibujos de objetos junto con su nombre escrito. Ir incidiendo en la velocidad.
• Lectura de textos para mejorar la fluidez y la prosodia. Ejercicios de lectura asistida (una persona que supervisa y ayuda al alumno/a  a mejorar esa lectura, usando el modelado, la corrección de errores o la lectura repetida de los textos). Ejercicio de lectura en alto, en entornos privados. 

Trabajar componentes relacionados con la comprensión lectora:

• Sintaxis. Trabajar diferentes estructuras sintácticas, trabajar el significado de los diferentes tipos de oraciones (simples y compuestas). Enseñanza explícita si se observan dificultades a este nivel.
• Semántica. Amplitud de vocabulario. Actividades que promueven el aprendizaje de nuevo vocabulario en cada lección.
• Lectura de textos: Se inicia con textos cortos y se va aumentando progresivamente la dificultad y el número de palabras. Creación de esquemas para mejorar la comprensión.
• Realización de inferencias: localizar en el texto las acciones sobre las que es necesario hacer inferencias, explicándole que debe completar por sí mismo la información que falta. Adivinar cómo continúa el relato.

¿Qué trabajar en cursos superiores?

Análisis de palabras:

• Leer palabras multisilábicas y usar estrategias para leer palabras desconocidas.
• Establecer conexiones entre los patrones de letras y los sonidos y emplear esta comprensión para leer palabras.
• Dividir las palabras desconocidas en sílabas durante la lectura.
• Emplear estrategias de análisis de palabras para dividir las palabras difíciles o largas en partes significativas, como terminaciones flexionales, prefijos, sufijos y raíces.

Fluidez:

• Descodificar palabras con precisión y automáticamente.
• Entrenamiento en lectura de palabras , cronometrando el tiempo.
• Agrupar palabras por su significado y dentro de frases.
• Leer con prosodia.

Vocabulario:

• Registros de palabras nuevas , no conocidas por el alumno o alumna
• Fomentar la conciencia del significado de las palabras...
• Emplear técnicas para averiguar el significado de las palabras desconocidas para ampliar su vocabulario
• Aprender palabras de forma incremental a través de múltiples exposiciones  a nuevos vocablos.
• Activar conocimientos previos específicos del contenido.

Comprensión:

• Monitorizar el progreso de su propia comprensión..
• Enlazar el contenido del texto con su conocimiento previo.
• Utilizar preguntas que faciliten la identificaciób de las ideas principales.
• Usar una variedad de estrategias efectivas de comprensión lectora antes, durante y después de la lectura: subrayar las ideas principales, representar mediante un dibujo lo que ocurre en el texto, utilizar diagramas...
• Establecer un propósito lector.

Metodología

• Fomentar el interés y curiosidad por los temas.
• Adecuar la complejidad y extensión del texto, aumentando su experiencia gratificante y exitosa.
• Instruir de forma explícita, sistemática y directa en habilidades de comprensión.
• Realizar prácticas de comprensión lectora en diferentes áreas y contextos.
• Fomentar la motivación y el aprendizaje autodirigido, ofreciendo herramientas para aumentar la capacidad para enfrentarse a las tareas que implican la lectura de forma independiente.
• Ofrecer prácticas de aprendizaje colaborativo basado en texto, que involucre  a los alumnos interactuando entre sí en textos variados.
• Trabajar con textos con diferente dificultad y temática.
• Emplear herramientas tecnológicas.
• Realizar evaluaciones formativas continuas  que le permita conocer su propio progreso (esto se puede realizar diariamente de forma informal).
• Tutoría personalizada.
• Dedicar más tiempo a tareas lectoras.
• Determinar el tiempo dedicado diariamente a estas actividades.

La evaluación

La evaluación debe ser continua, contextual, sistemática e integral. Se debe evitar que la nota de un examen tenga todo el peso en la nota final. En este sentido, el apoyo de la evaluación en recursos como la agenda, la carpeta portfolio, los esquemas conceptuales, etc., ayudan a organizar mejor la gestión del tiempo de aprendizaje, así como la evaluación.

Podemos utilizar variadas y complementarias formas de evaluación, adecuando esta siempre a las características de nuestro alumnado:

• Considerar la tarea como informadora de su proceso de aprendizaje.
• Valorar la realización diaria de las tareas y entrega en los plazos acordados.
• Dar importancia al esfuerzo. 
• Valorar el logro de los objetivos mediante la elaboración de proyectos, de trabajos, esquemas, mapas conceptuales, resúmenes, ...
• Realizar cuestionarios cortos y frecuentes sobre conceptos trabajados.
• Anticipar información sobre modelos de buena presentación de los trabajos: esquema a seguir, tipo de letra, formato…
• Anticipar una rúbrica sobre los criterios de evaluación del proyecto o el trabajo.
• Corregir con rapidez las actividades: cuanto más se demora la corrección más desvinculación hay con la tarea y cuando se hace de forma más inmediata se motiva más.
• Transmitir expectativas positivas.
• Ampliación del tiempo en el examen.
• Lectura inicial del examen en voz alta por parte del profesor y cuando sea necesario.
• Informar sobre la estructura del examen para organizar el tiempo y recalcar las instrucciones de forma personalizada al alumno/a.
• Revisión del examen por parte del profesorado al finalizar para comprobar que es comprensible y se han contestado todas las preguntas.
• Uso del ordenador en los exámenes.