Introducción

En este apartado hemos recogido las estrategias e intervenciones necesarias para garantizar una respuesta pedagógica de calidad al alumnado con Trastorno del Espectro Autista (TEA) dentro de un marco inclusivo y tomando como referencia las líneas estratégicas del Departamento de Educación.

Existen muchos estereotipos y prejuicios en torno al Trastorno del Espectro Autista, tanto en nuestra sociedad como en nuestro día a día. Para tratar de aclarar todas estas cuestiones se explicará la definición de este trastorno, el marco legal vigente y el marco teórico actual. Pero también estarán disponibles las estrategias, herramientas y protocolos de intervención necesarios para dar una respuesta adecuada a este alumnado nuestro.

Hoy en día tenemos muy presente el "autismo" en la calle y en el mundo educativo, pero, ¿desde cuándo tenemos conocimiento de la existencia del "autismo"? A veces no se puede avanzar sin saber de antemano qué recorrido hemos hecho ni qué es lo que nos ha llevado hasta aquí.

La etimología del término "autismo" tiene su origen en la Antigua Grecia y, de forma amplia, su significado podría definirse como "situar", "penetrar en uno mismo". En el ámbito clínico, el concepto inicial de "autismo" surgió hace más de un siglo como síntoma específico de esquizofrenia.

En 1938, Hans Asperger fue el primero en publicar el nombre de "autismo" y documentar muchas características. Utilizó el término "psicópata autista" en una conferencia. Desde entonces, el autismo comenzó a ser tolerado como un trastorno del neurodesarrollo. De hecho, la percepción del autismo ha cambiado de década en década, de ser un problema psicológico provocado por un mal crecimiento a un trastorno del neurodesarrollo de marcado carácter biológico provocado por factores genéticos y ambientales.

El autismo como tal aparece en 1980 en los Manuales de Diagnóstico y Estadística de Trastornos Mentales (DSM) como un trastorno del desarrollo. En la actualidad tenemos la 5ª edición actualizada en 2013 (DSM-5). Los criterios de diagnóstico se han ampliado para introducir síntomas más leves, como en el caso del síndrome de Asperger. El DSM-5 ya no distingue las subcategorías de trastorno del espectro autista. Estudia los déficits en las interacciones sociales y los comportamientos repetitivos.

 

Aproximación histórica al Trastorno Espectro Autista [Fuente: ConecTEA]

             

 

Trastornos del neurodesarrollo y Trastorno del Espectro Autista (TEA)...